El nuevo Audi TT debutó a nivel mundial en el Salón de Ginebra de 2014, con líneas que guardan muchas de las características del modelo de la primera generación de 1998, especialmente en su parte posterior. La tercera generación llega después de vender más de 500 mil unidades en todo el mundo.
En materia de diseño nos encontramos con detalles inéditos, como la forma de los pilares traseros con una ligera onda, así como las formas de las luces, que nos recuerdan el estilo de los años 90, época en la que J. Mays y Freeman Thomas diseñaron el prototipo de este deportivo.
Sus líneas exteriores muestran la característica línea clásica con algunos retoques que lo hacen lucir moderno. Observamos un frontal más afilado, con la típica parrilla Singleframe de trazos rectos, más ancha y plana, que pierde la insignia de los cuatro aros para dejarlos sobre el capó.
Los faros de serie son halógenos y, como opción, podrá incluir tecnología Matrix LED de última generación, cuya virtud es cambiar de luces de carretera cuando se circula de noche, ya que tiene los adelantos tecnológicos necesarios para detectar los autos que circulan en sentido contrario, así como para evitarles deslumbramientos a los peatones.
De perfil, nos encontramos con líneas clásicas que recuerdan, de manera intencionada, el primer modelo. Una de las característica que predominan son los anchos pasos de rueda, que conforman figuras geométricas propias y resaltan su perfil deportivo.
La tapa del depósito de gasolina sigue con la imagen clásica de las dos generaciones anteriores y abre al ejercer presión sobre ella. Entre tanto, en la zaga se conserva el alerón retráctil que se eleva al superar los 120 km/h y se oculta al reducir la velocidad por debajo de los 80 km/h.
Es en la cabina donde realmente está la revolución de este auto. Todos los elementos de mando se agrupan alrededor del conductor, siendo lo más destacado el sistema Audi virtual cockpit, un cuadro de instrumentos con pantalla en colores de 12,3 pulgadas que reemplaza el habitual cuadro de mandos con relojes analógicos.
El sistema tiene dos formas de visualizarse: el clásico, donde se muestran en primer plano el tacómetro y el cuenta-rrevoluciones, y el modo “Infotainment”, cuya prioridad es el sistema de audio.
También nos encontramos con nuevos asientos más livianos (cinco kilos menos de peso), que cuentan con apoyacabezas integrados y pueden regularse lateralmente de acuerdo con las necesidades del conductor y el acompañante.
Los difusores de aire desempeñan un importante papel, pues albergan los mandos del climatizador. En sus ejes se encuentran los reguladores para la calefacción del asiento, la recirculación de aire, la temperatura, la distribución y la potencia del flujo de aire.
El Audi TT Cupé sigue con la misma configuración 2+2 plazas, pero con aptitudes para el uso cotidiano. El maletero, situado debajo del largo portón trasero, tiene un volumen de 305 litros, 13 litros más que en el modelo anterior.
Por su parte, el mando central MMI Touch, con lector táctil, también es completamente nuevo y ha mejorado su manejo con más accesos directos y con un control de voz avanzado.
Para el mercado de muchos países e dispuso un motor 2.0 TFSI, con una potencia de 230 caballos y 37,72 kg-m de torque, el cual ofrece un consumo de combustible considerablemente menor en comparación con otros propulsores de la categoría.
Este motor se complementa con una caja de doble embrague S tronic de seis velocidades, la cual permite realizar los cambios en forma rápida y sin interrupción perceptible de la fuerza motriz. En el modo manual se puede manejar a través de las levas de cambio del volante, mientras que en el modo efficiency del drive select, el S tronic engrana la marcha libre cuando el conductor retira el pie del acelerador.
La tracción integral permanente quattro está disponible como opción. En condiciones normales, el embrague multidisco electrohidráulico entrega el torque a las ruedas delanteras, pero en caso necesario traspasa la fuerza con extraordinaria rapidez al eje trasero.
En caso de un manejo deportivo, el sistema envía la fuerza al eje trasero con mayor rapidez. De este modo, tiene un reducido coeficiente de rozamiento y un mejor control en curvas, por lo que la conducción será más segura.
A este dinámico comportamiento y a la maniobrabilidad precisa que ofrece, también participa activamente el esquema de suspensiones y la dirección. En el caso de las suspensiones, adelante se tiene una configuración McPherson, mientras que en el eje trasero de cuatro brazos puede procesar por separado las fuerzas longitudinales y transversales. Por su parte, la dirección progresiva con servoasistencia electromecánica de serie se hace más directa a medida que crece el ángulo de dirección. Si por algo destaca este TT es por su rapidez, facilidad de conducción y por la polivalencia.
Este es un sistema de conducción de carácter opcional. Con solo pulsar una tecla, el conductor puede elegir que el pedal del acelerador, el actuador de sonido y la dirección asistida trabajen en modo comfort, auto, dynamic o efficiency. Además, el sistema interviene en varios componentes opcionales: el S tronic, la tracción quattro, el regulador de velocidad y el climatizador automático de confort.
Con su concepto de construcción híbrida, la carrocería del TT presenta una nueva fase evolutiva del Audi Space Frame (ASF), basada en la plataforma modular transversal. El frontal del vehículo y el suelo del habitáculo incorporan numerosos componentes de acero endurecidos en molde, en tanto que la estructura del habitáculo y las piezas de la capa exterior y los accesorios son de aluminio. Por segunda vez consecutiva Audi ha conseguido reducir el peso en un cambio generacional del TT.
MOTOR: TFSI, TURBO, CUATRO CILINDROS Y 16 VÁLVULAS.
TRANSMISIÓN: S-TRONIC DE SEIS VELOCIDADES.
TORQUE: 37,72 KG-M ENTRE 1.600-4.300 RPM.
PESO (AL VACÍO): 1305 Kg.
RELACIÓN PESO/POTENCIA: 5,67 Kg/HP.
ACELERACIÓN (O A 100 Km/h): 6,0 SEGUNDOS.
DIMENSIONES (LARGO/ANCHO/ALTO): 4,17 /1,83/1,35 Metros.
Costo: $155.000.000
Emisiones de CO2:137 g/km
En materia de diseño nos encontramos con detalles inéditos, como la forma de los pilares traseros con una ligera onda, así como las formas de las luces, que nos recuerdan el estilo de los años 90, época en la que J. Mays y Freeman Thomas diseñaron el prototipo de este deportivo.
Sus líneas exteriores muestran la característica línea clásica con algunos retoques que lo hacen lucir moderno. Observamos un frontal más afilado, con la típica parrilla Singleframe de trazos rectos, más ancha y plana, que pierde la insignia de los cuatro aros para dejarlos sobre el capó.
Los faros de serie son halógenos y, como opción, podrá incluir tecnología Matrix LED de última generación, cuya virtud es cambiar de luces de carretera cuando se circula de noche, ya que tiene los adelantos tecnológicos necesarios para detectar los autos que circulan en sentido contrario, así como para evitarles deslumbramientos a los peatones.
De perfil, nos encontramos con líneas clásicas que recuerdan, de manera intencionada, el primer modelo. Una de las característica que predominan son los anchos pasos de rueda, que conforman figuras geométricas propias y resaltan su perfil deportivo.
La tapa del depósito de gasolina sigue con la imagen clásica de las dos generaciones anteriores y abre al ejercer presión sobre ella. Entre tanto, en la zaga se conserva el alerón retráctil que se eleva al superar los 120 km/h y se oculta al reducir la velocidad por debajo de los 80 km/h.
Es en la cabina donde realmente está la revolución de este auto. Todos los elementos de mando se agrupan alrededor del conductor, siendo lo más destacado el sistema Audi virtual cockpit, un cuadro de instrumentos con pantalla en colores de 12,3 pulgadas que reemplaza el habitual cuadro de mandos con relojes analógicos.
El sistema tiene dos formas de visualizarse: el clásico, donde se muestran en primer plano el tacómetro y el cuenta-rrevoluciones, y el modo “Infotainment”, cuya prioridad es el sistema de audio.
También nos encontramos con nuevos asientos más livianos (cinco kilos menos de peso), que cuentan con apoyacabezas integrados y pueden regularse lateralmente de acuerdo con las necesidades del conductor y el acompañante.
Los difusores de aire desempeñan un importante papel, pues albergan los mandos del climatizador. En sus ejes se encuentran los reguladores para la calefacción del asiento, la recirculación de aire, la temperatura, la distribución y la potencia del flujo de aire.
El Audi TT Cupé sigue con la misma configuración 2+2 plazas, pero con aptitudes para el uso cotidiano. El maletero, situado debajo del largo portón trasero, tiene un volumen de 305 litros, 13 litros más que en el modelo anterior.
Por su parte, el mando central MMI Touch, con lector táctil, también es completamente nuevo y ha mejorado su manejo con más accesos directos y con un control de voz avanzado.
Para el mercado de muchos países e dispuso un motor 2.0 TFSI, con una potencia de 230 caballos y 37,72 kg-m de torque, el cual ofrece un consumo de combustible considerablemente menor en comparación con otros propulsores de la categoría.
Este motor se complementa con una caja de doble embrague S tronic de seis velocidades, la cual permite realizar los cambios en forma rápida y sin interrupción perceptible de la fuerza motriz. En el modo manual se puede manejar a través de las levas de cambio del volante, mientras que en el modo efficiency del drive select, el S tronic engrana la marcha libre cuando el conductor retira el pie del acelerador.
La tracción integral permanente quattro está disponible como opción. En condiciones normales, el embrague multidisco electrohidráulico entrega el torque a las ruedas delanteras, pero en caso necesario traspasa la fuerza con extraordinaria rapidez al eje trasero.
En caso de un manejo deportivo, el sistema envía la fuerza al eje trasero con mayor rapidez. De este modo, tiene un reducido coeficiente de rozamiento y un mejor control en curvas, por lo que la conducción será más segura.
A este dinámico comportamiento y a la maniobrabilidad precisa que ofrece, también participa activamente el esquema de suspensiones y la dirección. En el caso de las suspensiones, adelante se tiene una configuración McPherson, mientras que en el eje trasero de cuatro brazos puede procesar por separado las fuerzas longitudinales y transversales. Por su parte, la dirección progresiva con servoasistencia electromecánica de serie se hace más directa a medida que crece el ángulo de dirección. Si por algo destaca este TT es por su rapidez, facilidad de conducción y por la polivalencia.
Este es un sistema de conducción de carácter opcional. Con solo pulsar una tecla, el conductor puede elegir que el pedal del acelerador, el actuador de sonido y la dirección asistida trabajen en modo comfort, auto, dynamic o efficiency. Además, el sistema interviene en varios componentes opcionales: el S tronic, la tracción quattro, el regulador de velocidad y el climatizador automático de confort.
Con su concepto de construcción híbrida, la carrocería del TT presenta una nueva fase evolutiva del Audi Space Frame (ASF), basada en la plataforma modular transversal. El frontal del vehículo y el suelo del habitáculo incorporan numerosos componentes de acero endurecidos en molde, en tanto que la estructura del habitáculo y las piezas de la capa exterior y los accesorios son de aluminio. Por segunda vez consecutiva Audi ha conseguido reducir el peso en un cambio generacional del TT.
MOTOR: TFSI, TURBO, CUATRO CILINDROS Y 16 VÁLVULAS.
TRANSMISIÓN: S-TRONIC DE SEIS VELOCIDADES.
TORQUE: 37,72 KG-M ENTRE 1.600-4.300 RPM.
PESO (AL VACÍO): 1305 Kg.
RELACIÓN PESO/POTENCIA: 5,67 Kg/HP.
ACELERACIÓN (O A 100 Km/h): 6,0 SEGUNDOS.
DIMENSIONES (LARGO/ANCHO/ALTO): 4,17 /1,83/1,35 Metros.
Costo: $155.000.000
Emisiones de CO2:137 g/km
Comentarios
Publicar un comentario