El Volkswagen Golf tiene un amplio recorrido en la historia alrededor del mundo. Fue presentado en 1974 con la idea de reemplazar al Escarabajo y desde entonces han pasado siete generaciones que lo han convertido en el gran referente del segmento.
Para los seguidores de la tecnología Downizing (motores de cilindrada pequeña pero con gran entrega de potencia), este es un propulsor digno de admirar. No en vano ha sido uno de los más galardonados (nueve veces consecutivas) en el "International Engine of the Year Award".
Hacemos referencia a una mecánica de 1390 c.c. asistida por turboalimentación e intercooler, inyección directa que proviene de una nueva familia de motores que en Volkswagen se denominan EA211. El motor TSI se presentó en el año 2006 con 1400 c.c. y, gracias a un sistema de doble sobrealimentación por compresor y turbo, rendía hasta 170 caballos de potencia.
Posteriormente se variaron los rangos con la misma cilindrada y se lograron potencias entre 122, 140 y 150 caballos, esta última es el número que genera el motor TSI.
Con todos estos antecedentes, no cabe duda de que estamos frente a uno de los Golf con mejor rendimiento dinámico. Obviamente, no podemos olvidar el GTi, que está por encima con 220 caballos, subiendo las emociones a lo más alto cuando se saca todo su poderío a flote.
El que monta el TSI es un bloque de aluminio que también empuja a otros modelos del grupo, como el Audi A3, el Skoda Octavia y el Seat León. Se caracteriza por ofrecer una respuesta progresiva que llega sin mayor esfuerzo a la zona alta del tacómetro y empuja con ímpetu incluso cuando la aguja llega a las 6.500 rpm, cuando se produce el corte de inyección.
En revoluciones medias (1.500 a 3.500 rpm) se mueve con altura, sin esfuerzos desmesurados y sin que el conductor tenga que hacer más fuerza que el mismo motor. Pero el mérito no es solo de este propulsor, pues el buen trabajo también se hace evidente con la caja DSG7 (doble embrague) de siete cambios disponible en las versiones Comfortline y Sportline, que le otorga al Golf esa característica que todos buscamos en un auto: buen desempeño y aprovechamiento de la potencia.
El paso entre cambios es suave, casi imperceptible, y se puede ir a bajas revoluciones sin perder el ritmo. Es tan versátil que nos puede llevar con tranquilidad o ir más rápido para divertirnos. Eso sí, al presionar más el pedal puede subir el consumo de combustible, pero esto no le quita que su comportamiento sea el mejor del segmento. Para este motor la marca anuncia una velocidad máxima de 215 km/h y alcanza una aceleración hasta los 100 km/h en solo 8,7 segundos.
La dirección con asistencia eléctrica de dureza variable: es precisa y muy obediente, mientras que el apartado de la suspensión merece reconocimiento por su capacidad para filtrar las imperfecciones de la carretera.
El Golf 1.4 TSI se comercializa en dos versiones: Comfortline (una con caja mecánica de seis velocidades y la DSG con modo Sport) y la Sportline con caja DSG Sport. Este Golf tiene muchos puntos a favor. La calidad del interior es buena, por encima del promedio.
El equipamiento lo acerca a algunos modelos de gamas altas. Encontramos plásticos que recubren la parte superior del tablero y las puertas, muy suaves al tacto. Hay inserciones cromadas que le otorgan una sensación más premium, aunque las partes bajas de la consola y de la guantera no cumplen con el mismo propósito.
La posición de los mandos es otro de los buenos puntos a favor. Los controles están dispuestos para ser operados de manera ergonòmica. Como en los demás Golf, la pantalla ubicada en el cuadro de instrumentos (entre los relojes] es digital y cuenta con un monitor táctil multifuncional de 6,5 pulgadas en la parte superior de la consola.
La posición de manejo es otro aspecto a elogiar: la columna de dirección es regulable en altura y profundidad. La silla del conductor es ajustable en altura y ofrece regulación lumbar con muy buena sujeción lateral.
En cuanto al equipamiento, varia de acuerdo con la referencia. Puede equipar riñes de aleación ligera de l6 o 17 pulgadas, con llantas de 205/55 y 225/45 (versión Sportline). En (a versión más alta encontramos volante de tres radios con diseño deportivo, luces diurnas tipo LED, ópticas delanteras Bi xenón, techo panorámico de cristal y cámara de reversa.
La conectividad se puede lograr a través del sistema Android Auto, Car Play y Mirror Link. También nos encontramos con un lector SD, entradas USB para iPod y iPhone, y sistema de audio con 8 parlantes.
El precio del Volkswagen Golf TSI 2017 oscila entre $18000 y $22000 USD.
¿Qué es un motor TSI?
TSI significa Turbo Stratified Inyection. Esta es una tecnología denominada Downizing, que tiene la particularidad de sobrealimentar los cilindros al mezclar las tecnologías del TDI con la del FSI (Fuel Stratified Injection). El resultado es un mayor desempeño con un reducido consumo de combustible.
Este tipo de motores entregan el torque a bajas revoluciones (1.500 - 3.500 rpm). En carretera, la acción de sobrepaso es más rápida y segura, el ahorro de combustible se percibe, se reduce la emisión de gases contaminantes y la pérdida de potencia es poca en ciudades con mucha altura.
Fuente: revista Turbo.
Para los seguidores de la tecnología Downizing (motores de cilindrada pequeña pero con gran entrega de potencia), este es un propulsor digno de admirar. No en vano ha sido uno de los más galardonados (nueve veces consecutivas) en el "International Engine of the Year Award".
Hacemos referencia a una mecánica de 1390 c.c. asistida por turboalimentación e intercooler, inyección directa que proviene de una nueva familia de motores que en Volkswagen se denominan EA211. El motor TSI se presentó en el año 2006 con 1400 c.c. y, gracias a un sistema de doble sobrealimentación por compresor y turbo, rendía hasta 170 caballos de potencia.
Posteriormente se variaron los rangos con la misma cilindrada y se lograron potencias entre 122, 140 y 150 caballos, esta última es el número que genera el motor TSI.
Con todos estos antecedentes, no cabe duda de que estamos frente a uno de los Golf con mejor rendimiento dinámico. Obviamente, no podemos olvidar el GTi, que está por encima con 220 caballos, subiendo las emociones a lo más alto cuando se saca todo su poderío a flote.
Volkswagen Golf TSI 2017
El que monta el TSI es un bloque de aluminio que también empuja a otros modelos del grupo, como el Audi A3, el Skoda Octavia y el Seat León. Se caracteriza por ofrecer una respuesta progresiva que llega sin mayor esfuerzo a la zona alta del tacómetro y empuja con ímpetu incluso cuando la aguja llega a las 6.500 rpm, cuando se produce el corte de inyección.
En revoluciones medias (1.500 a 3.500 rpm) se mueve con altura, sin esfuerzos desmesurados y sin que el conductor tenga que hacer más fuerza que el mismo motor. Pero el mérito no es solo de este propulsor, pues el buen trabajo también se hace evidente con la caja DSG7 (doble embrague) de siete cambios disponible en las versiones Comfortline y Sportline, que le otorga al Golf esa característica que todos buscamos en un auto: buen desempeño y aprovechamiento de la potencia.
El paso entre cambios es suave, casi imperceptible, y se puede ir a bajas revoluciones sin perder el ritmo. Es tan versátil que nos puede llevar con tranquilidad o ir más rápido para divertirnos. Eso sí, al presionar más el pedal puede subir el consumo de combustible, pero esto no le quita que su comportamiento sea el mejor del segmento. Para este motor la marca anuncia una velocidad máxima de 215 km/h y alcanza una aceleración hasta los 100 km/h en solo 8,7 segundos.
La dirección con asistencia eléctrica de dureza variable: es precisa y muy obediente, mientras que el apartado de la suspensión merece reconocimiento por su capacidad para filtrar las imperfecciones de la carretera.
El Golf 1.4 TSI se comercializa en dos versiones: Comfortline (una con caja mecánica de seis velocidades y la DSG con modo Sport) y la Sportline con caja DSG Sport. Este Golf tiene muchos puntos a favor. La calidad del interior es buena, por encima del promedio.
El equipamiento lo acerca a algunos modelos de gamas altas. Encontramos plásticos que recubren la parte superior del tablero y las puertas, muy suaves al tacto. Hay inserciones cromadas que le otorgan una sensación más premium, aunque las partes bajas de la consola y de la guantera no cumplen con el mismo propósito.
La posición de los mandos es otro de los buenos puntos a favor. Los controles están dispuestos para ser operados de manera ergonòmica. Como en los demás Golf, la pantalla ubicada en el cuadro de instrumentos (entre los relojes] es digital y cuenta con un monitor táctil multifuncional de 6,5 pulgadas en la parte superior de la consola.
La posición de manejo es otro aspecto a elogiar: la columna de dirección es regulable en altura y profundidad. La silla del conductor es ajustable en altura y ofrece regulación lumbar con muy buena sujeción lateral.
En cuanto al equipamiento, varia de acuerdo con la referencia. Puede equipar riñes de aleación ligera de l6 o 17 pulgadas, con llantas de 205/55 y 225/45 (versión Sportline). En (a versión más alta encontramos volante de tres radios con diseño deportivo, luces diurnas tipo LED, ópticas delanteras Bi xenón, techo panorámico de cristal y cámara de reversa.
La conectividad se puede lograr a través del sistema Android Auto, Car Play y Mirror Link. También nos encontramos con un lector SD, entradas USB para iPod y iPhone, y sistema de audio con 8 parlantes.
El precio del Volkswagen Golf TSI 2017 oscila entre $18000 y $22000 USD.
¿Qué es un motor TSI?
TSI significa Turbo Stratified Inyection. Esta es una tecnología denominada Downizing, que tiene la particularidad de sobrealimentar los cilindros al mezclar las tecnologías del TDI con la del FSI (Fuel Stratified Injection). El resultado es un mayor desempeño con un reducido consumo de combustible.
Este tipo de motores entregan el torque a bajas revoluciones (1.500 - 3.500 rpm). En carretera, la acción de sobrepaso es más rápida y segura, el ahorro de combustible se percibe, se reduce la emisión de gases contaminantes y la pérdida de potencia es poca en ciudades con mucha altura.
Fuente: revista Turbo.
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