Kia Rio 2018: características, especificaciones técnicas, precio caballos de potencia. La cuarta generación del Kia Rio recibe importantes cambios de diseño y tecnología, que lo convierten en un auto más moderno y más sofisticado, cualidades hoy demandadas por los compradores de autos compactos. Para los países de Latinoamérica, este renovado Rio llega desde la planta de Kia en México, y empezará su comercialización a mediados de este año.
Teniendo en cuenta que se trata de uno de los modelos más demandados de Kia a nivel mundial (solo superado por la Sportage), la renovación del Rio representa un movimiento “importante” para la compañía, pues habla mucho acerca de las preferencias de compradores de automóviles compactos.
En el caso local, también es una noticia bastante trascendente, pues ha sido un automóvil clave para posicionar a la marca en el tercer lugar de ventas, hoy reconocida por el diseño, la calidad de construcción y la eficiencia de su gama de vehículos.
Por ello, la casa matriz eligió a Colombia (concretamente la región del Eje Cafetero) para dar a conocer la cuarta generación de este modelo a la prensa regional, cuyo debut mundial apenas tuvo lugar en el pasado Salón de París.
De entrada llama la atención su nueva carrocería (creada por los centros de estilo de Alemania y California), junto con el moderno diseño del habitáculo. En ambos casos, es evidente que sus creadores se inspiraron en el carácter elegante de los hatchbacks alemanes para otorgarle una apariencia más sofisticada al nuevo Kia Rio.
En Kia también son conscientes que no basta con crear un auto llamativo y eficiente, sino que el comprador de autos compactos hoy también demanda ciertas características de segmentos superiores y por ello, el proceso de refinamiento al que fue sometido el Rio va más allá del plano estético y se hace latente en aspectos como la tecnología a bordo o la gestión del conjunto mecánico, mostrándose más aplomado y preciso desde los primeros metros detrás del timón.
Una novedad mecánica importante es que la caja automática pasa de tener cuatro a seis cambios, lo cual incidirá directamente en sus prestaciones y consumos.
El nuevo Río presenta la última evolución de la parrilla 'nariz de tigre’ de Kia, ahora más delgada en altura y más ancha con una moldura en los alrededores y en color negro brillante.
La parrilla está integrada a las nuevas luces delanteras, más esculpidas para una apariencia más definida y presenta nuevas luces LED de día en forma de U de estilo distintivo. En tanto el capó, es más largo y presenta pliegues en forma de horquilla que van desde la base de los pilares hasta la rejilla y las luces delanteras.
De perfil, la apariencia alargada, es más equilibrada gracias a sus lineas rectas, claramente definidas que recorren la longitud total del carro y a lo largo de sus puertas, generando una apariencia más alargada para un aspecto más confidente.
La parte posterior es más erguida, con un parabrisas trasero casi vertical. La linea recta que sale de la rejilla, pasa por las luces delanteras y a lo largo de la parte superior de las puertas, continúa dando la vuelta a la parte trasera del carro, combinada con luces traseras más esculpidas y delgadas, disponible con LEDs opcionales las cuales presentan una nueva apariencia distintiva en forma de flecha.
En su tablero, la pantalla táctil de ocho pulgadas con la interfaz multimedia K-movie (accesorio exclusivo para Colombia) contribuye a pasar por alto la presencia de plásticos duros en toda la cabina, aunque hay que destacar sus buenos acabados.
El agradable aspecto de su habitáculo está complementado con un equipamiento heredado de modelos más costosos, pues el auto que probamos contaba con faros de encendido automático, tapicería en cuero, apertura sin llaves y encendido por botón (KeyLess), climatizador automático, techo corredizo y función de plegado eléctrico de los retrovisores, elementos que vendrán de serie en los Rio más equipados.
Un ligero incremento en la distancia entre ejes (10 mm) y la longitud (15 mm), permitieron lograr un carro de 4,06 metros de largo con 2,58 metros de separación entre ejes. A su vez esto repercutió en el espacio interior, que es uno de los más amplios del segmento según Kia y ahora permite que cuatro ocupantes (o hasta cinco) viajen con suficiente comodidad.
El baúl también incrementó su capacidad hasta los 325 litros y dadas sus formas, acoge una gran cantidad de equipaje, pero su boca de carga es algo elevada, lo cual puede dificultar la acomodación de objetos pesados.
El nuevo Rio es fabricado en La planta de Pesquería, Nuevo León, México, donde también es armado el sedán Cerato Pro.
Si el anterior modelo era reconocido por su equilibrado comportamiento dinámico, el nuevo Rio hace gata de una marcha más aplomada, con una suspensión que exhibe un buen compromiso entre comodidad y estabilidad, pues filtra bien las irregularidades e impide balanceos notorios de la carrocería.
Combinada con una dirección de asistencia eléctrica, las reacciones siempre son suaves y progresivas en curvas, mientras que en ciudad es un aliado perfecto para el tráfico, pues la visibilidad es buena en todos los ángulos y resutta ser sumamente maniobrable en espacios estrechos.
La postura de manejo es bastante cómoda, ya que el tacto suave del embrague y el selector de cambios se complementan con un timón ajustable en altura y profundidad. Ya sobre la marcha, el conjunto mecánico resulta ser competente, pero sin exhibir un desempeño brillante en carretera, aunque resulta ser adecuado para desplazarse en entornos urbanos y registra consumos de combustible en torno a los 50 kilómetros por galón. Hay que destacar el completo computador a bordo, que ofrece información muy precisa sobre la conducción del auto en una útil pantalla de 3,5 pulgadas.
El Kia Rio 2018 cuenta con una cilindrada de 1368 c.c., una potencia de 99 caballos a 6000 rpm, un torque de 13,6 Kg-m a 4000 rpm y su precio aun estaría por ser definido.
Fuente: revista Turbo
Teniendo en cuenta que se trata de uno de los modelos más demandados de Kia a nivel mundial (solo superado por la Sportage), la renovación del Rio representa un movimiento “importante” para la compañía, pues habla mucho acerca de las preferencias de compradores de automóviles compactos.
En el caso local, también es una noticia bastante trascendente, pues ha sido un automóvil clave para posicionar a la marca en el tercer lugar de ventas, hoy reconocida por el diseño, la calidad de construcción y la eficiencia de su gama de vehículos.
Por ello, la casa matriz eligió a Colombia (concretamente la región del Eje Cafetero) para dar a conocer la cuarta generación de este modelo a la prensa regional, cuyo debut mundial apenas tuvo lugar en el pasado Salón de París.
De entrada llama la atención su nueva carrocería (creada por los centros de estilo de Alemania y California), junto con el moderno diseño del habitáculo. En ambos casos, es evidente que sus creadores se inspiraron en el carácter elegante de los hatchbacks alemanes para otorgarle una apariencia más sofisticada al nuevo Kia Rio.
En Kia también son conscientes que no basta con crear un auto llamativo y eficiente, sino que el comprador de autos compactos hoy también demanda ciertas características de segmentos superiores y por ello, el proceso de refinamiento al que fue sometido el Rio va más allá del plano estético y se hace latente en aspectos como la tecnología a bordo o la gestión del conjunto mecánico, mostrándose más aplomado y preciso desde los primeros metros detrás del timón.
Una novedad mecánica importante es que la caja automática pasa de tener cuatro a seis cambios, lo cual incidirá directamente en sus prestaciones y consumos.
Kia Rio 2018: un estilo moderno
El nuevo Río presenta la última evolución de la parrilla 'nariz de tigre’ de Kia, ahora más delgada en altura y más ancha con una moldura en los alrededores y en color negro brillante.
La parrilla está integrada a las nuevas luces delanteras, más esculpidas para una apariencia más definida y presenta nuevas luces LED de día en forma de U de estilo distintivo. En tanto el capó, es más largo y presenta pliegues en forma de horquilla que van desde la base de los pilares hasta la rejilla y las luces delanteras.
De perfil, la apariencia alargada, es más equilibrada gracias a sus lineas rectas, claramente definidas que recorren la longitud total del carro y a lo largo de sus puertas, generando una apariencia más alargada para un aspecto más confidente.
La parte posterior es más erguida, con un parabrisas trasero casi vertical. La linea recta que sale de la rejilla, pasa por las luces delanteras y a lo largo de la parte superior de las puertas, continúa dando la vuelta a la parte trasera del carro, combinada con luces traseras más esculpidas y delgadas, disponible con LEDs opcionales las cuales presentan una nueva apariencia distintiva en forma de flecha.
Kia Rio 2018: un espacio tecnológico
En su tablero, la pantalla táctil de ocho pulgadas con la interfaz multimedia K-movie (accesorio exclusivo para Colombia) contribuye a pasar por alto la presencia de plásticos duros en toda la cabina, aunque hay que destacar sus buenos acabados.
El agradable aspecto de su habitáculo está complementado con un equipamiento heredado de modelos más costosos, pues el auto que probamos contaba con faros de encendido automático, tapicería en cuero, apertura sin llaves y encendido por botón (KeyLess), climatizador automático, techo corredizo y función de plegado eléctrico de los retrovisores, elementos que vendrán de serie en los Rio más equipados.
Un ligero incremento en la distancia entre ejes (10 mm) y la longitud (15 mm), permitieron lograr un carro de 4,06 metros de largo con 2,58 metros de separación entre ejes. A su vez esto repercutió en el espacio interior, que es uno de los más amplios del segmento según Kia y ahora permite que cuatro ocupantes (o hasta cinco) viajen con suficiente comodidad.
El baúl también incrementó su capacidad hasta los 325 litros y dadas sus formas, acoge una gran cantidad de equipaje, pero su boca de carga es algo elevada, lo cual puede dificultar la acomodación de objetos pesados.
El nuevo Rio es fabricado en La planta de Pesquería, Nuevo León, México, donde también es armado el sedán Cerato Pro.
Kia Rio 2018: virtudes conocidas
Si el anterior modelo era reconocido por su equilibrado comportamiento dinámico, el nuevo Rio hace gata de una marcha más aplomada, con una suspensión que exhibe un buen compromiso entre comodidad y estabilidad, pues filtra bien las irregularidades e impide balanceos notorios de la carrocería.
Combinada con una dirección de asistencia eléctrica, las reacciones siempre son suaves y progresivas en curvas, mientras que en ciudad es un aliado perfecto para el tráfico, pues la visibilidad es buena en todos los ángulos y resutta ser sumamente maniobrable en espacios estrechos.
La postura de manejo es bastante cómoda, ya que el tacto suave del embrague y el selector de cambios se complementan con un timón ajustable en altura y profundidad. Ya sobre la marcha, el conjunto mecánico resulta ser competente, pero sin exhibir un desempeño brillante en carretera, aunque resulta ser adecuado para desplazarse en entornos urbanos y registra consumos de combustible en torno a los 50 kilómetros por galón. Hay que destacar el completo computador a bordo, que ofrece información muy precisa sobre la conducción del auto en una útil pantalla de 3,5 pulgadas.
El Kia Rio 2018 cuenta con una cilindrada de 1368 c.c., una potencia de 99 caballos a 6000 rpm, un torque de 13,6 Kg-m a 4000 rpm y su precio aun estaría por ser definido.
Fuente: revista Turbo
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